domingo, 19 de abril de 2009

Azul

Mírame y deja que me sumerja
en el azul de tus ojos
déjame surcar ese cielo

Piano

Yo desde siempre había soñado con poder tocar algún instrumento musical... siempre había querido tocar el violín o ser directora de una orquesta. Pero el destino me trajo un piano... a los 12 años, a mi madre le dio por comprarme uno de esos teclados... yo siempre había querido tener uno de esos... lastimosamente, un piano de verdad no cabe en mi casa... aunque el teclado que tengo es bastante grande... tiene cinco escalas y 35 teclas. El primer día que lo trajeron ya sabía tocar "La donna e mobile"... me di cuenta de que se me daba bastante bien. Me metieron a unas clases, y no puedo decir que no aprendí nada... pero sentía que estaba perdiendo el tiempo. Prefería aprender yo sola... y eso hice y sigo haciendo.

Cuando toco el piano, me olvido del mundo y toda mi concentración está centrada en mis dedos que vuelan sobre las teclas... Me he dado cuenta, que ser músico conlleva ser perseverante. La perseverancia es importante en un artista, aunque no lo crea... yo soy muy perezosa y ese es el peor defecto para un artista... porque no termina sus obras, las deja inacabadas... pero... yo prefiero tocar cuando tenga ganas, escribir cuando tenga ganas... cuando me venga la inspiración.
Intenté componer... y aún recuerdo la primera que compuse. Era sobre un hada azul... y aunque era simple, me gustaba. También compuse unas marchas... una es parecida a la de "When Johnny Comes Marching Home Again", y también me parecía que sonaba a Peter Pan... y la otra se parece a "March of Nutcracker" de Tchaicovsky. Es lo malo... que se asemejan a otras ya existentes... como ya dije con anterioridad en este blog, una vez compuse una muy parecida a "While my guitar gently weeps" mucho antes de haberla escuchado... y que me había dado un vuelco el corazón cuando la escuché por primera vez... me recordaba tanto a mi composición...

Me gusta mucho tocar el piano... lástima que los que me rodean no me tomen en serio... Por cierto... ODIO LEER PARTITURAS. Yo todo lo toco de memoria...

Y, finalmente, aquí está "Alla turca" tocada por una servidora... lástima que mi madre estropease la grabación hablando y cantando... Además, me equivoqué muchas veces.



martes, 14 de abril de 2009

Catalunya

Esta Semana Santa estuve en Barcelona, y tuve la oportunidad de ver tres obras de arte de Gaudí: la Sagrada Familia, el Parque Güell y la Casa Milà. Antoni Gaudí (1852 – 1926) me parece un artista y un genio, porque, por muy modernistas que sean las construcciones actualmente... ninguna me fascina tanto como las de Gaudí. Sus construcciones son como, casas de otro mundo.
La Sagrada Familia, es una Iglesia que construyó Gaudí, en la cual he puesto yo los pies... yo estaba empeñada en subir por una de esas cuatro torres de más de 100 metros de alto... sí, por esas escaleras de caracol. Pero mi padre se negó. Y subimos en el ascensor. Ya arriba, se veía una vista panorámica de toda Barcelona... y, yo, como vivo en un décimo estoy acostumbrada a las grandes alturas así que no sentí mucho vértigo, excepto cuando me asomé por la barandilla y miré hacia abajo... sentí un vértigo terrible y dejé de mirar. La Iglesia tiene cuatro torres, y cada una -me parece- tiene unas escaleras de caracol... Gaudí murió antes de terminarla, pero dejó unos planos los cuales los arquitéctos actuales dicen "seguir" y han construído la segunda parte de la Iglesia, que en mi opinión personal les ha quedado bastante chapuza. Deberían haberla dejado como Gaudí la dejó... me parece una falta de respeto continuar una obra de arte QUE NO ES TUYA. Después hay una parte, donde está tallada en la piedra el nacimiento de Jesús y es realmente sublime.

Luego fuimos al Parque Güell, que lo que más me gustó fué la casa dónde él vivía... me gustan las casas que él hace, ¡porque hasta las barandillas y los picaportes están hechos por él! Y de una forma tan singular, que sólo él podría imaginar... él decía que su maestro era el árbol. Porque se inspiraba en la naturaleza para crear sus edificios.

Y, por último, vimos la casa Milà... un edificio pensado para ser un conjunto de apartamentos... a la señora Milà no le gustó ni un pelo aquella casa... y es que, resaltaba mucho entre las demás casas... era como si estuviese fuera de lugar... como un pingüino en la selva tropical... ¡era como una casa del futuro! Pero a mí me fascinó... me gustaría vivir en una casa así... además, los muebles eran de principio de siglo XX y a mí me fascinan las antigüedades del S. XX., en el cual nací, puedo decir orgullosamente...

Y... esas fotos las tomó mi padre seguramente... Y, estaba todo plagado de gringos, franceses, etc... y todo estaba escrito en catalán, porque ellos creen ser otro país...